Ecología y veganismo
A medida que los habitantes de La Tierra aumentan su consumo desmedido de carne, se están arrasando grandísimas extensiones de tierra para dejar más espacio para los animales y los cultivos propios para alimentarlos.
Hoy en día, más del 65% de las tierras deforestadas en Brasil (Amazonas), la más grande selva tropical que existe en el mundo, se utilizan como pastos para el ganado. Enormes extensiones de bosque, pastizales y humedales son destruidos para ser usados como suelo de pastoreo y para el cultivo de alimentos para estos propios animales.
Desde las selvas tropicales en Brasil hasta los antiguos bosques de pinos en China, se están destruyendo ecosistemas enteros para satisfacer los paladares de los demandantes de carne.
La cría de animales para la alimentación requiere ingentes cantidades de tierra, alimentos, energía y agua. Los subproductos de la agricultura animal contaminan nuestro aire y vías fluviales. Al evitar los productos animales, los veganos son ecologistas en potencia.
¿Qué es la ecología?
Según Wikipedia: La ecología es la rama de la biología que estudia las relaciones de los diferentes seres vivos entre sí y con su entorno: «la biología de los ecosistemas».
Fue el científico alemán Ernst Haeckel, quien acuñó este término en el año 1869. La finalidad era la de darle un nombre a la ciencia que estudia las relaciones entre todos seres vivos y el medio ambiente.
Ernst Haeckel fue uno de los más importantes científicos de su época. Naturalista, médico y filósofo que identificó muchas decenas de especies de seres vivos y dio nombre a muchas más. Trazó un árbol genealógico de todas las formas de vida y encontró nuevos términos en biología como filogenia, antropogenia, célula madre o ecología entre otras.
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Puntos claves en la ecología
Impacto de la ganadería en el medio ambiente
Ganadería intensiva
Calentamiento global
Contaminación ambiental
Más allá del maltrato a los animales derivado de la que la industria ganadera, el sector ganadero contamina. Y no solo la atmósfera, también el agua.
.La ganadería intensiva no es solo una gran consumidora de agua, es también una de los grandes protagonistas de la contaminación de los acuíferos .Según la FAO, nos encontramos ya en una “crisis global de la calidad del agua”. Purines, antibióticos, fertilizantes y plaguicidas contaminan los acuíferos de una forma alarmante.
.La ONU sostiene que 1 litro de agua contaminada ensucia 8 litros de agua fresca, por lo tanto la contaminación de agua pura a nivel mundial bordea los 12.000 km3 cada año.
¿Qué podemos hacer nosotros?
No podemos seguir ignorando a todos los organismos. Es por esto que debemos reducir de forma drástica la producción y el consumo de carne. Especialmente en España, segundo país de Europa con el mayor consumo de carne y donde proliferan los proyectos de macrogranjas.
No estás solo/a. Cada día más gente se plantea alejar de su plato de comida los productos animales. Por razones de salud, medioambientales o éticas.
Una dieta vegana es probablemente la mejor forma de reducir el impacto en el planeta Tierra, no solo los gases de efecto invernadero, sino además por el uso de suelo y agua.
La ganadería es uno de los mayores contribuyentes de las emisiones de gases de efecto invernadero, la deforestación, la contaminación del agua y la contaminación del aire. En todo el mundo, la producción de carne y lácteos utiliza el 83% de las tierras agrícolas y produce el 60% de las emisiones de gases de efecto invernadero de la agricultura, mientras que proporciona solo el 18% de las calorías y el 37% de las proteínas.
La ganadería no es un sistema sostenible, pero su huella ambiental puede reducirse drásticamente con una dieta basada en plantas.
Máximo respeto para los veganos, sobre todo si es por motivos éticos. Pero sinceramente, creo que una sociedad predominantemente vegana generaría muchos problemas económicos y ecológicos, imposibles de cuantificar.
Problemas económicos, perdida de muchos puestos de trabajo incluído. Por otra parte parte, por el solo hecho de estar vivo, ya estamos matando a un montón de animales «invisibles»: al acostarnos, al pisar, al tocarnos la cara…Es inevitable. Si no comemos ciertas especies (gallinas, ovejas, cerdos, vacas…) es posible que desaparezcan o casi. Sobre todo si se es muy radical y tampoco se consumen la leche, los huevos… No los mataríamos pero es que ni siquiera hubiesen nacido. ¿Que es peor?. Se pueden hacer cosas como no comer los lechales ni los terneros ni los cochinillos, por ejemplo. También estos animales podrían vivir en libertad, como los jabalíes, por ejemplo. También se podrían criar como animales de compañía o algo así. El tema es muy complicado, tiene muchas perspectivas.
En un mundo vegano ¿que pasa con la agricultura?. ¿No habría una sobreexplotación agrícola?. ¿No podría producirse una deforestación?
También se podría comer sólo a animales carnívoros y no a los herbívoros aunque esto supongo que traería una sobrepoblación de los herbívoros y la consiguiente deforestación. Además de que los herbívoros, sin quererlo, al comer también están comiendo a muchos bichitos que hay en los pastos, etc. Por lo tanto, al haber tantos herbívoros y tan pocos carnivoros estos bichitos serían comidos en mayor medida, para lo malo y para lo bueno y para todo lo demás. Y después está el tema de los gases, claro, para más complicación. No se sabe que es lo menos malo. Quizás hay que ser amante de algunos animales pero no de todos. No lo se. Aunque también hay quien sólo es amante de ellos en el plato. Y perdón por la divagación.