Santuario Winston – Santuario de caballos
Durante más de 12 años, Santuario Winston ha estado rescatando animales indefensos, abandonados y desalojados; muchos de ellos habían sido maltratados y padecían secuelas físicas y psíquicas, que este centro trata de remediar con todas sus fuerzas y con la ayuda de expertos.
Algunos provienen de subastas de carne, otros se han encontrado allí atados a árboles para morir, otros son de animales de doma o ejemplares viejos, enfermos o heridos que ya no sirven para su propósito original.
Santuario Winston tiene como misión el rescate y recuperación de caballos maltratados y/o abandonados y garantizar la protección de su vida en libertad.
Dolores Pérez fundó el Santuario Winston, hogar de caballos libres, hace 12 años en Ávila y, desde entonces, su misión es proteger a estos animales explotados y maltratados
Habitantes del santuario
A día de hoy hay más de 50 caballos en las instalaciones; pero no solo eso, ya que hay ovejas, ponis, gallinas, perros o gatos distribuidos en distintas fincas. El centro se encarga de cuidarlos y ofrecerles una vida cercana a la naturaleza. En este enclave en plena campiña abulense han pasado más de 150 equinos en sus 10 años de historia.
Cuando ingresa un caballo en el Santuario Winston se le realizan todas las curas necesarias y se revisa su estado de salud. Si el problema de salud es grave, un veterinario interviene quirúrgicamente en los boxes que tiene el santuario exclusivamente para los equinos enfermos. En última instancia, el animal es trasladado al hospital.
En el santuario viven y vivirán siempre en libertad. Estos animales suelen llegar asustados y recelosos, aunque con el tiempo y con mucho cariño, van confiando en equipo y voluntarios.
¿Cómo se puede ayudar?
Se puede colaborar de muchas maneras. Como socio/a colaborador/a, siendo padrino/a o realizando un donativo
Por desgracia, en estos tiempos de crisis en los que vivimos, no se pueden acoger a ninguna subvención, y ahora mismo todo lo que están haciendo está costeado por la propia entidad.
Además de todo esto, puedes ayudar siendo voluntario o voluntaria. Puedes acudir y echar una mano en el repaso de vallas, en la limpieza de cuadras, de apoyo cuando vengan grupos de gente, sean niños o personas con necesidades especiales, ayudando en caso necesario en una operación o en las curas que requiera alguno de los animales o, simplemente, pasando un rato con los caballos y dándoles todo el cariño que eres capaz de dar.
