¿Se puede congelar el seitán?
El seitán es un alimento de origen vegetal que se obtiene a partir del gluten, la proteína que se encuentra en el trigo. También se conoce como «carne de gluten» o «trigo de carne». Es una opción popular en la cocina vegetariana y vegana debido a su textura carnosa y su capacidad para absorber sabores.
El seitán es uno de los sucedáneos de carne preferidos. Junto con el tofu es uno de los preferidos en las cocinas. Es barato y fácil de preparar.
Se puede usar para sustituir la carne en casi cualquier plato o receta, ya que tiene una textura y un sabor similares, y se cocina de la misma forma que la carne, por eso es una de las opciones preferidas de veganos, vegetarianos y flexitarianos.
Una vez hervido, el seitán se puede congelar. Puedes congelar el seitán como masa cruda, en platos preparados o en un caldo. Presenta cambios mínimos en el sabor y la textura, y muchos prefieren la textura masticable que agrega la congelación. El seitán durará en el congelador de 3 a 6 meses.
Si ha hecho seitán casero, hay que dejarlo enfriar a temperatura ambiente o refrigérelo antes de congelarlo. Después, córtalo en trozos del tamaño que desees según la cantidad que estés acostumbrado a comer o usar en tus platos, después envuelve las piezas de seitán individualmente en plástico y luego en papel de aluminio para evitar olores. Más tarde, coloca los trozos de seitán envueltos en una bolsa para congelador o en un recipiente hermético tipo Tupperware. Sella la bolsa o el recipiente del congelador herméticamente, expulsando la mayor cantidad de aire posible.
Por último es muy recomendable etiquetar la bolsa o el recipiente del congelador con la fecha y el contenido. Ya solo queda dejarlo en el congelador.