La industria del cuero sacrifica a miles de millones de animales
Cada año, la industria mundial del cuero sacrifica más de mil millones de animales y curte sus pieles y cueros. Muchos de estos animales soportan todos los horrores de la cría industrial, incluido el hacinamiento y el confinamiento extremos, la privación y la castración sin anestesia, el marcado y el corte de cola, así como el trato cruel durante el transporte y el sacrificio.
La piel de todos estos seres vivos se convierte en cuero para nuestras chaquetas, zapatos y muebles. Sin embargo, los conceptos erróneos sobre la industria detrás de él siguen siendo increíblemente comunes.
La mayoría de la población asume que el cuero proviene solo de las vacas y, por lo tanto, es simplemente un subproducto de la industria cárnica, pero esto no es cierto. En realidad, el cuero se fabrica con la piel de muchos animales, incluidos ovejas, cerdos, caballos, cocodrilos, serpientes, focas, ciervos, peces, gatos, perros y muchos más.
Mito sobre el cuero
Hay un mito muy extendido en la población, al creer erróneamente que la industria del cuero es una industria secundaria ligada al al sacrificio de ganado vacuno. Mucha gente cree que el comprar carteras o cinturones de cuero no incrementa la demanda de vacas asesinadas. Este desafortunado error de los consumidores resulta de la creencia de que el cuero es un simple subproducto de la industria ganadera, industria que mantiene animales en condiciones insanas y abusivas con el fin de obtener carnes y productos derivados.
La mayor parte del cuero que se produce y vende está hecho de pieles de ganado vacuno y ternero, pero también se fabrica cuero de ovejas, corderos, cabras y cerdos. Otras especies se cazan y matan específicamente por sus pieles, como cebras, bisontes, canguros, elefantes, cocodrilos, caimanes, avestruces, lagartijas y serpientes.
Otros animales «exóticos», como caimanes y cocodrilos, son criados en fábricas por su piel y carne.